Modo Lluvia: “¡Ay mi madre!”



Este miércoles, a dos horas de que tocara mi hora de salida, cayó un rayo que se llevó el teléfono y, por ende, el Internet de la zona.
La lluvia y el hambre su fusionaron para recordarme mis meses de “experto cocinero criollo” en Madrid (cocinar o morir), así que me dispuse a preparar un delicioso platillo que, como verán todos los criollos que leen este blog, han probado en más de una ocasión.

El platillo lleva el nombre de ¡Ay mi madre!
Advertencia: el ¡Ay mi madre! También se come fuera de República Dominicana, pero como el de aquí ninguno. ¡Garantizado!
¡Vamos a cocinar!

Ingredientes:
-       Un bojote (mucha) de lluvia
-       Tránsito a la criolla (chóferes imprudentes)
-       Vehículo con sin aire, o con éste dañado.
-       Voladora, guagua o autobús repleto.
-       Hora pico.
-       Drenaje, o falta de drenaje, tapado.

Preparación:
Mezcle todos los ingredientes en una olla marca República Dominicana, en el orden que le dé la gana, pues, como en la aritmética: “el orden de los factores no altera el pique”.
Una vez bien revueltos, meta la olla RD al horno de la paciencia por el tiempo que le tome llegar a su casa, sabiendo que, esto variará en atención a la porción usada de cada ingrediente.

Sirva húmedo o, si estuvo en una guagua o carro público, “mojao´ como un pollito”.

Cada porción alcanza para tooooodo el vivo que ande en la calle en los momentos que el cielo se rompe a llorar.
Nota: Si queda con hambre, valor y cordura, para volver a comer el ¡Ay mi madre! tan sólo espere que Meteorología diga algo así como “El país será azotado por una vaguada que nos convertirá, como siempre, en la Venecia del Caribe”.

¡Buen provecho!

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